Bajo el soliloquio de mi mente
solo oía una voz
voz infértil e inerte,
sin sentido ni razón.
Jamás conseguí imaginar
encontrar tal tesoro,
tejer mi corazón con hilos
de tu alma, que es de oro.
Abrir los ojos en la oscuridad
y tras el ruido de un beso,
irme dos estrellas a encontrar
Jamás llegué a imaginar
cómo y cuánto se puede amar
hasta el punto de pedir a Dios...
Que prefiero la muerte
antes que hacerte llorar
y el peor de los infiernos
a de ti tenerme que separar.
2 comentarios:
Precioso
No sabría decirte en que eres mas mediocre, si en poesia o si en narrativa... Te repites mucho, tus temas son mediocres, tus textos carecen de recursos... Tienes que mejorar muchísimo si quieres verdaderamente llegar a hacer este blog digno de disfrute cuando se lea.
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